• “La educación no sólo acerca la lectura y el conocimiento a la población, también es una manera de legitimar a los regímenes políticos”: Armando Alcántara
• “A lo largo de estos 100 años, la SEP ha sido un campo de batalla política, en el que no se ha podido dejar atrás la burocracia”: Reinalda Soriano 

Paola Cortés Pérez 

Desde 1921 a la fecha, resultado de diversas y numerosas reformas a la Secretaría de Educación Pública (SEP), la dependencia gubernamental se ha convertido en una institución grande, sus tareas han aumentado y complejizado, dejando pendientes históricos, mencionaron los participantes de la Mesa 1 del Foro Académico “100 años de la Secretaría de Educación Pública: conversaciones desde el presente”. 

Es organizado por el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la Universidad Veracruzana y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), como parte de los festejos por los 25 años del programa de estudios del Doctorado en Historia y Estudios Regionales, incorporado al Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC). 

En la mesa de diálogo estuvieron Armando Alcántara Santuario, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Reinalda Soriano Peña, investigadora adscrita al Centro Interdisciplinario de Investigación y Docencia en Educación Técnica, del Tecnológico Nacional de México, y Rosa Nidia Buenfil Burgos, del Programa de Análisis Político de Discurso e Investigación (PAPDI). 

Amando Alcántara presentó “Primer centenario de la SEP: orígenes, anhelos y desafíos”, y dijo que dentro de la modernidad la educación es considerada una de las actividades más importantes, ya que no sólo tiene como fin específico acercar la lectura y el conocimiento a la población, también es una manera de legitimar a los regímenes políticos.

En el caso de México no fue diferente, sabemos que después de una revolución que provocó un millón de víctimas, en las primeras décadas del siglo XX el país estaba en construcción y el instrumento para lograrlo fue la Constitución Mexicana promulgada en 1917. 

“El panorama político no estaba totalmente pacificado y el proponerse la creación de un Ministerio de Educación y Bellas Artes (que luego se convirtió en la SEP) fue fundamental para el desarrollo de un país que estaba en malas condiciones.” 

Indicó que los desafíos que tiene la dependencia federal son: ser una institución muy grande y compleja; el crecimiento del promedio de escolaridad, que actualmente es de más de nueve años; la calidad educativa, ya que la existente es insatisfactoria; el corporativismo sindical y la falta de continuidad en las políticas educativas, cada gobierno empieza desde cero y crea cosas nuevas. 

Algunos puntos positivos en estos 100 años han sido la disminución significativa de los índices de analfabetismo, actualmente son menores al cinco por ciento en personas mayores de 18 años; la creación de los libros de texto gratuitos, que son un gran apoyo para los estudiantes y una importante ayuda para las familias. 

Reinalda Soriano presentó la ponencia “La emergencia y procedencia de la SEP. A 100 años”; mencionó que a lo largo de ese tiempo la secretaría ha sido un campo de batalla política en el que no se ha podido dejar atrás la burocracia, la falta de recursos, la inequidad y el corporativismo sindical, constantes a lo largo de este primer centenario.

“Hay que reconocer que no todos los niños y jóvenes han tenido acceso a la educación pública y con la pandemia provocada por el Covid-19 se han agudizado todos estos problemas.” 

Sin embargo, dijo que el plantear que no ha habido avances es quedarse en un polo, lo cierto es que no se puede estar exento de señalar las carencias y aspectos que deben trabajarse no sólo en el proyecto de gobierno, sino en términos de responsabilidad por parte de la sociedad, investigadores y educadores. 

“La educación no sólo es enseñar a leer y escribir, sino a convivir mejor, coadyuvar a una existencia más humana y más justa.” 

Finalmente, Rosa Nidia Buenfil en su plática “La SEP huellas de su presencia entre lo local y lo internacional”, señaló que desde 1921 a la fecha han sido numerosas las reformas que modifican las orientaciones, sus tareas aumentaron y se han complejizado. 

“Por una parte, las tareas históricas no se logran resolver del todo, hay algunas que permanecen; las condiciones han sido impactadas en estos 100 años por la intensificación de ciertos procesos como la interdependencia cultural, política y económica de las naciones en el planeta. 

En la actualidad, dijo que se plantean funciones que no se logran cumplir cabalmente, se lucha y se continúa luchando, además se han introducido nuevas tareas que tienen que ver con las condiciones mundiales y una creciente penetración de la relación internacional.