La familia, escuela más importante de la vida  y célula básica de la sociedad: Iglesia Católica.

La familia, escuela más importante de la vida  y célula básica de la sociedad: Iglesia Católica 

 

  • El matrimonio entre un hombre y una mujer es el origen de la familia y transmisores de la vida, señala.

    Irineo Pérez Melo.- La familia es la “célula básica de la sociedad” y la “escuela más importante de la vida”, porque en ella es donde aprendemos las nociones fundamentales de la convivencia humana y de la civilidad, consideró la Arquidiócesis de Xalapa.

    En el comunicado dominical emitido por la Oficina de Comunicación Social, en el marco de la celebración del día de la Sagrada Familia, destaca que a través de ella aprendemos valores y virtudes como el amor, la comprensión, la tolerancia, el perdón, el diálogo, el espíritu de sacrificio, la honestidad, el sentido del deber, el respeto por la palabra dada, el amor al trabajo, la responsabilidad, el respeto, etc.

    Cuando una familia descuida estas enseñanzas, estamos ante una familia que ha fracasado en su misión y como consecuencia causa daños irreparables en relación con sus hijos. Si uno no aprende a vivir ciertos valores en familia difícilmente los aprenderá fuera de ella, señala el documento signado por el presbítero José Manuel Suazo Reyes.

    Como célula base de la sociedad, la familia funciona como el tejido del organismo, el cual está formado por varias células, así también la sociedad está compuesta por pequeños núcleos familiares.

    Y como el organismo es sano cuando sus células lo están, así también la sociedad está sana y sólida cuando las familias son moralmente sanas y sólidas, cuando las familias están bien integradas. Por el contrario, cuando la sociedad no tiene familias sanas entonces enfrenta una grave enfermedad que amenaza su existencia.

    “Cuando se trata de la familia cristiana tiene la función de ser como una pequeña iglesia, le llamamos “Iglesia doméstica”, es decir la Iglesia de la casa. Quienes hemos tenido el privilegio de crecer dentro de una familia, sabemos por experiencia de las bondades y riquezas que hemos recibido por habernos desarrollado dentro de una familia”, se añade.

    Se destaca también que el matrimonio entre un hombre y una mujer es el origen de la familia, la cual forma parte del proyecto de Dios y qué éste sea indisoluble. De otra manera la base sobre la que se construiría la familia sería frágil, precaria y estaría sujeta a las mutaciones y a la inseguridad del corazón.

    Además, sostiene que es parte del proyecto de Dios que el amor que une al hombre y a la mujer en la familia, sea absoluto, total, único y exclusivo. La Biblia dice: “dejará el hombre a su padre y a su madre… y los dos serán una sola carne” (Gn 2, 34).

    Los esposos son colaboradores con Dios en la transmisión de la vida. Es voluntad divina que los esposos estén abiertos a la apertura y acogida de la vida. “Sean fecundos y multiplíquense” (Gn 1, 28). De esta manera, los esposos están llamados a cooperar en la obra creadora de Dios, siendo procreadores, con sentido de responsabilidad y con generosidad.

    De igual manera, es voluntad de Dios que la familia sea una comunidad de personas que vive y realiza la comunión de amor entre sus diversos miembros.

    Finalmente, se menciona que este día en que celebramos a la Sagrada Familia, encomendémosles a todas nuestras familias para que el testimonio de San José y de María ilumine todos los hogares de modo que también en ellos los hijos crezcan en sabiduría, en edad y en gracia delante de Dios y de los hombres, es decir, los hijos encuentren un ambiente apropiado para desarrollarse y crecer en forma armoniosa.