Los socavones y deslaves representan un riesgo para los que tienen la necesidad de transitar por ellas.
Por Irineo Pérez Melo
San Andrés Tlalnelhuayocan, Ver., A consecuencia de las lluvias pasadas, las carreteras que comunican de la cabecera de este municipio a sus congregaciones, así como con la capital del estado, se encuentran en un estado muy deplorable, lo que representa un grave riesgo para quienes transitan por las mismas.
Los socavones y deslaves son evidentes y, con cada lluvia que cae, tienden a agrandarse, con las consecuencias que ello podría traer consigo, ya que solo se han colocado cintas para señalar el peligro que representa el no tomar las debidas precauciones cuando se circula por estas vías de comunicación.
Un claro ejemplo de esta situación se observa en el tramo de la rúa ubicada en las inmediaciones de Xalapa con este municipio, en dónde hay un socavón de gran dimensión que abarca al menos cuatro metros lineales y tres de profundidad sobre uno de los carriles.
También, otro más se tiene con rumbo a la comunidad de Mesa Chica, donde la tierra ha caído y por pedazos se ha llevado la carpeta asfáltica, poniendo en riesgo la integridad física de los conductores y automovilistas que tienen la necesidad de circular por esta carretera, indicó uno de los vecinos que se identificó como Francisco.
Además, hay un sinfín de baches que dificultan aún más el paso hacia esta parte de la montaña, pues principalmente los desperfectos se ubican en curvas, el cual por su ubicación es difícil percatarse de su existencia y se da cuenta del problema cuando la unidad resiente al pasar por dichos baches.
En las partes afectadas fueron colocadas las cintas de precaución por los mismos vecinos para alertar a los conductores a tener cuidado, ya que los cimientos están frágiles y podrían caer en los hoyancos o al barranco, en el peor de los casos, indicaron usuarios de dicha vía de comunicación.
Finalmente, se mencionó que las recientes lluvias agravaron los daños en la carretera, y debido a la humedad existente en la zona, ha hecho que los baches y deslaves sean de mayores dimensiones, y el ayuntamiento se ha visto imposibilitado por rehabilitarlo o dar mantenimiento ante la proximidad del cierre del ejercicio constitucional.