Se prevé que para la cosecha 2020-2021, el quintal costará entre 65 y 70 dólares, y se importan un millón 800 mil sacos de baja calidad: Fernando Celis.
Por Irineo Pérez Melo
Xalapa, Ver., Por cuarto año consecutivo los cafetaleros del país enfrentan el problema de los precios bajos del aromático grano y de la desmedida importación de la variedad de café robusta que realiza la transnacional Nestlé, lo cual agrava la situación del mercado cafetalero nacional por la competencia desleal que esto genera.
Lo anterior fue asegurado por Fernando Celis Pastrana, asesor general de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), quien dijo que se vive un panorama incierto al inicio de la cosecha del ciclo 2020-2021 al tasarse entre 65 y 70 dólares el quintal de café, cuando el café que se produce en nuestro país que es de la variedad arábigo lavado anda en 150 dólares el quintal, casi el doble de lo que se paga por la robusta.
“Ahora que empiecen las compras del café en México, las cuales están controladas por los oligopolios Nestlé, AMSA y Cafés California, aplicarán la referencia de la Bolsa, situación que generará ‘una bronca’, porque las organizaciones no vamos a aceptar estos precios”, señaló en conferencia de prensa, efectuada en la Plaza Sebastián Lerdo de Tejada de esta capital.
Reveló que ya se están teniendo reuniones con funcionarios de las secretarías de Economía y de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) para ver esta situación, pero sobre todo por la gran importación que se está dando de café robusta, de mala calidad, y a un precio muy bajo.
“Estamos insistiendo ante la Secretaría de Economía para que se haga un muestreo de la calidad y verificar que en esas importaciones no se incluya cafés dañados, que está trayendo la Nestlé de Brasil, a fin de garantizar la pureza del café que se consume”, añadió.
Sin embargo, por la situación económica que se vive, el consumidor mexicano prefiere comprar bolsitas que expende la Nestlé elaborados con café robusta de mala calidad a un costo de 8 pesos, con azúcares y colores artificiales, que adquirir un kilogramo de café arábigo con un costo mayor, pero de calidad.
Por tal motivo, se está dando la importación de un millón 800 mil sacos de esa variedad con un precio de mil 250 pesos, desplazando al café mexicano del mercado nacional.
“Es una competencia desleal y la Nestlé está ganando; se está llenando de dinero a lo bestia, como dicen; y todavía hacen campañas de que bajan los precios porque trae café más barato. ¡Imagínense el quintal de robusta está en 2 mil pesos! Que es menor al que se produce en nuestro país y de mejor calidad”, concluyó.