• Esta conducta regula los factores que afectan el desarrollo y funcionamiento en beneficio de la salud y el bienestar 

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Yolanda Campos Uscanga, catedrática e investigadora del Instituto de Salud Pública (ISP) de la Universidad Veracruzana (UV), expresó que la ruta del autocuidado ha mostrado ser la estrategia más efectiva para prolongar la vida y llegar a un envejecimiento pleno. 

Puntualizó que esta conducta regula los factores que afectan el desarrollo y funcionamiento en beneficio de la vida, salud y bienestar.  

La investigadora impartió el 10 de noviembre la conferencia “Implicaciones del autocuidado y resistencia al cambio”, dentro del Seminario Virtual “Prevención de la diabetes desde un enfoque multidisciplinar”. 

Este evento formó parte de la Semana Universitaria para la Prevención del Sedentarismo y la Diabetes, organizada por la Dirección de Actividades Deportivas (DADUV) en coordinación con las facultades de Medicina y Psicología, el Sistema de Atención Integral a la Salud (SAISUV), el ISP y el Centro para el Desarrollo Humano e Integral de los Universitarios (Cendhiu). 

Yolanda Campos comentó que el cuidar de sí es un acto vital que se representa en compleja variedad de actividades que una persona realiza para resguardar y mantener su existencia.  

Explicó que es el resultado de un proceso socializador donde la persona aprende costumbres, hábitos, actitudes, creencias y valores, que representan la autovaloración, la sensibilidad y el compromiso que cada uno tiene consigo mismo. 

Mencionó que en muchas ocasiones las personas presentan resistencia al autocuidado debido a muchos aspectos, entre los que están los determinantes sociales, la automatización de hábitos, el hedonismo –doctrina que identifica el bien con el placer– y la apreciación por la vida.  

La docente enfatizó que la verdadera odisea del autocuidado se encuentra en lo habitual, ya que si bien las conductas esporádicas negativas suelen presentar pocos riesgos, si se repiten con frecuencia en el tiempo y ambientes familiares las complicaciones se incrementan.  

Detalló que no es lo mismo ingerir comida con escaso valor nutricional en una reunión familiar cada 15 días, que hacerlo varias veces por semana.  

Afirmó que en muchas ocasiones el autocuidado implica renunciar a satisfactores que no son positivos para la salud, ante lo que es recomendable encontrar conductas y actividades que permitan obtener niveles de satisfacción similares.  

  Aseguró que es posible ser feliz a través de un estilo de vida saludable que no tenga una visión de restricción, sino de apertura y conciencia, pero sobre todo de compromiso con el bienestar propio.