Insano centrarse en temas de política partidista, cuando muchos problemas están desatendidos y no se han resuelto.

Insano centrarse en temas de política partidista, cuando
muchos problemas están desatendidos y no se han resuelto

• El respeto y promoción de la dignidad de las personas y de la familia son tareas que nunca terminan de realizarse: Arquidiócesis de Xalapa.

La Arquidiócesis de Xalapa consideró que no es sano que únicamente la mirada este centrada en temas de política partidista, tanto a nivel nacional como en el estado de Veracruz, porque seguimos con muchos problemas que no debemos desatender y no se han resuelto del todo.
Lo anterior se desprende del comunicado dominical emitido por la Oficina de Comunicación Social de esa asociación religiosa, en donde se destaca la violencia en Medio Oriente, las dinámicas de violencia, la falta de medicamentos en los hospitales, la desintegración familiar por la migración de connacionales al país vecino del norte, la inflación económica, etc., permean en nuestro entorno.
“No debemos olvidar que todavía tenemos mucho que hacer y resolver en lo social, cultural, económico y política del bien común. El respeto y promoción de la dignidad de la persona y de la familia son tareas que nunca terminan de realizarse”, enfatiza el documento signado por el presbítero Juan Beristain de los Santos.
En el comunicado, subraya que el respeto a los derechos fundamentales debe ser una meta y tarea que debe renovarse y replantearse a corto y a largo plazo.
Al respecto, se ha hecho mucho pero no se ha realizado todo. Falta seguir formando la conciencia de todos para que se respeten estos valores fundamentales en todos los niveles, refiere.
Además, hace alusión a la Carta Pastoral del encuentro con Cristo a la solidaridad con todos de los obispos mexicanos, en donde nos recuerda que organismos nacionales e internacionales en vez de defender los derechos fundamentales, los vulneran y niegan expresamente.
“A nivel internacional algunas instituciones “antes que querer afrontar y resolver estos graves problemas respetando la dignidad de las personas y de las familias, y el derecho inviolable de todo hombre a la vida, prefieren promover e imponer por cualquier medio, una masiva planificación de los nacimientos” (321). La defensa de la vida y la promoción de la paz es una tarea para cada día, se indica por último.