Irreverente e irresponsable el alcalde de Xalapa al exhortar a la población el cuidarse los unos a los otros…

No tiene estrategias en materia de seguridad para brindar protección a los xalapeños: Manuel Bernal.

Por Irineo Pérez Melo

Xalapa, Ver., El exhorto del alcalde Hipólito Rodríguez Herrero de “cuidarse unos a los otros para enfrentar la violencia que se vive en Xalapa es “una irreverencia e irresponsabilidad” que denota la falta de conocimiento del ejercicio administrativo y político, aseguró Manuel Bernal Rivera, secretario de Derechos Humanos del Comité Directivo Estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

En conferencia de prensa, el también vocero de la dirigencia estatal perredista, criticó al edil xalapeño por no contar con una estrategia para brindar protección a los ciudadanos y con la recomendación hecho, abdica, aunque sea temporalmente, de la responsabilidad que la ley le exige.

“Pareciera que se quiere convertir ahora en un predicador, porque no tiene alternativas o no quiere usar alternativas y nos manda el mensaje de cuidados unos a los otros para enfrentar la inseguridad latente en la capital del estado”, añadió.

Y su irresponsabilidad va más allá, al afirmar que familias se están yendo de Xalapa por tanta inseguridad, pues admite que “más de 15 mil familias están dejando sus viviendas por el temor a la inseguridad, por las amenazas, por las extorciones; pareciera que a él le complace dar este tipo de notas”, afirmó.

En ese tenor, sostuvo que si la corporación de Seguridad Pública y todas las dependencias de Seguridad federal no son capaces de detener esta criminalidad en el municipio de Xalapa, el alcalde por no realizar bien su trabajo se estará ganando con creces el calificativo del “peor presidente municipal” de la capital veracruzana.

Es lamentable, dijo, que a pesar de que Xalapa cuenta con un presupuesto abundante, los resultados en materia de seguridad no se perciben al momento e insistió, que su conducta pusilánime e irresponsable ha hecho que la incertidumbre y el temor se apoderen irremediablemente de los xalapeños, concluyó.