Juchique de Ferrer uno de los 15 municipios desfalcados, según el informe de la Cuenta Pública 2021 del Orfis.

Juchique de Ferrer uno de los 15 municipios desfalcados, según el informe de la Cuenta Pública 2021 del Orfis
• Se detecto un presunto daño patrimonial por 27,727,689.23 pesos

La administración de la ex alcaldesa, Lizbeth Emilia Portilla Gumecindo, es de las que se encuentran en el “ojo del huracán” luego de conocerse el informe de la cuenta pública 2021, en dónde el Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis) detectó un presunto daño patrimonial de 27,727,689.23 millones de pesos
La titular del Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz (ORFIS), Delia González Cobos, informó que la realización de la auditoria correspondiente al año 2021, Juchique de Ferrer se encuentra dentro de los 15 municipios más saqueados.
Esta situación ha molestado e inconformado a la población, ya que Lizbeth Emilia Portilla, robo a manos llenas, saqueándolo inmisericordemente en perjuicio de los habitantes de esta demarcación municipal.
Las observaciones realizadas por el ORFIS hacen presumir la existencia de un daño patrimonial a ls Hacienda Pública Municipal, por lo que las autoridades correspondientes promoverán el fincamiento de responsabilidades y determinación de daños y perjuicios de conformidad con el Título Quinto de la Ley Número 364 de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas del Estado de Veracruz.
Ante esta situación, los habitantes de Juchique de Ferrer exigen justicia, ya que la ex alcaldesa Lizbeth Emilia Portilla Gumecindo ha logrado evadir la justicia estando prófuga y escondiéndose de la justicia sin pagar lo que ha saqueado al pueblo, quienes demandan que no tapen sus desfalcos.
Al robo y desfalco al municipio de Juchique de Ferrer se suma las afectaciones al parque vehicular oficial y de la policía municipal, los cuales dejó totalmente desamantelado, chocado y sin llantas; camiones tipo volteo y maquinaria pesada desaparecida, dejando las instalaciones sin muebles de oficina, sin documentación y obras públicas “fantasmas” sin realizar; en pocas palabras un municipio devastado financieramente, en espera de que sea llamada a cuentas.