• Académicos compartieron los retos de acercar a los alumnos de artes al trabajo de investigación 
• Se busca una complementariedad en las experiencias educativas para que durante la licenciatura desarrollen proyectos

David Sandoval Rodríguez 

Acercar a los estudiantes de artes al proceso de investigación es complicado, por lo que éste debe incentivarse desde su ingreso a licenciatura, coincidieron académicos y artistas latinoamericanos asistentes al XIII Encuentro Internacional de Semilleros de Investigación, organizado por el Centro de Investigaciones Unitec (CIU) de Colombia y en el que participaron como invitados docentes y alumnos de la Universidad Veracruzana (UV). 

En la mesa redonda “Diseño, arte y cultura”, académicos del CIU, la Universidad “César Vallejo” de Perú y la Universidad Vizcaya de las Américas, campus Mérida en Yucatán, compartieron experiencias exitosas y retos que enfrentan en la enseñanza de los métodos de investigación en las carreras de Diseño Gráfico y Arquitectura. 

Karla Robalino Sánchez, curadora en el Museo de la Casona de San Marcos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Perú, comentó que los alumnos que están por elaborar su tesis deben aprender las normas APA; por otro lado, en cuanto a los temas, dijo que “quieren abarcar todo y poco a poco uno tiene que irlos orientando para que vayan entendiendo que es imposible”. 

Juan Tanta Restrepo, director de la Escuela Profesional de Arte y Diseño en Universidad “César Vallejo”, apuntó que a lo largo de la carrera los jóvenes van desarrollando competencias investigativas que son potenciadas con actividades cortas de investigación que les faciliten sustentar sus trabajos con bibliografía adecuada. 

“Se busca una complementariedad de ideas entre los distintos ciclos, que en México son los semestres, y los cursos tienen que aportar ideas a un trabajo de investigación en teoría del diseño.” 

Tanta Restrepo dijo que es fundamental que los estudiantes “se involucren con otras carreras, no solamente desde la creatividad sino también en la ingeniería, la educación, la matemática y cómo un profesional puede generar estas intervenciones”. 

Ileana Góngora Hernández, profesora de Arquitectura en la Universidad Vizcaya de las Américas, reconoció que el principal esfuerzo con las generaciones jóvenes radica en hacerles comprender que están realizando una investigación. 

“Siempre dicen que no les interesa participar en investigación hasta que llegan a las materias donde es necesario desarrollar este tipo de proyectos, que además son interdisciplinarios dado que se relacionan con necesidades de infraestructura y sociales.” 

Entre los aspectos positivos, reconoció que se incrementó la visibilización de las mujeres en la historia de la arquitectura y el uso del lenguaje inclusivo es una muestra de que se están adaptando al mismo, tanto mujeres como hombres. 

“Me parece que este lenguaje y la manera en que ha venido permeando en ellos la actualización de los planes de estudio con la inclusión de mujeres como referencia en las materias, es muy positivo”, afirmó. 

Anguley Isaza Urrego, académica en Diseño de Espacios y Escenarios del CIU, puntualizó que existe una línea de formación en investigación dentro de los planes de estudio. 

“En la carrera de Diseño Gráfico se ha realizado un enorme esfuerzo para que los profesores puedan enseñar la importancia de la investigación dentro de los procesos creativos, necesariamente hay que pasar por ahí y se busca que el producto de creación sea coherente con los propósitos y enfoque de la investigación”. 

El programa de Diseño Gráfico tiene varios semilleros de investigación e incluso brinda la posibilidad de que los estudiantes se reúnan para solicitar un tutor de la institución que supervise sus trabajos; “es una cultura que hay en CIU y creo que es un caso de éxito y una experiencia muy positiva que ha permitido que se concreten procesos”, comentó. 

“Para mí el secreto es ser mitad profesor y mitad coach, entusiasmarlos muchísimo y en la medida que tengan un tema que les apasione lo van a aprender a hacer en el camino; eso es lo más importante”, concluyó la profesora.