Gobierno de AMLO desinteresado en establecer dialogo tripartita con sectores productivos; le interesa más la política asistencialista: Ricardo Espinoza.
Por Irineo Pérez Melo
Xalapa, Ver., A pesar de las propuestas hechas por los sectores productivos “no vemos un interés por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para establecer un diálogo tripartito entre los empresarios, gobierno y los trabajadores para la conformación de un plan nacional que compense y contrarreste la crisis sanitaria y económica que se padece en el país”.
Lo anterior fue informado por Ricardo Espinoza López, secretario general del Comité Ejecutivo Nacional de la Confederación Auténtica de Trabajadores, quien dijo que hace falta también el establecimiento de un diálogo social para enfrentar la crisis con los otros sectores, como el educativo, de salud y de otro tipo de organizaciones.
En entrevista, vía telefónica, el dirigente nacional obrero destacó el papel que han jugado con las empresas para evitar el cierre de las empresas y la pérdida de empleo, “ya que el gobierno mismo no ha diseñado una política económica, ni siquiera unilateral para la ayuda en la prevención, en el mantenimiento o la reapertura de las empresas”.
Explicó que ahora en la reapertura de las actividades y de la reactivación económica, los sindicatos han manifestado una total disposición en la revisión de sus condiciones generales de trabajo, planteando demandas moderadas para resolverlas a través de la vía conciliatoria con el único fin de mantener los empleos y los salarios, y la defensa de los derechos de los trabajadores.
Sin embargo, eso al gobierno eso no le interesa, “le interesa el mundo subsidiado, el mundo no asalariado y asistencialista. Está bien que se atienda, pero se desprotege totalmente al mundo productivo; se ha dejado solo a los sectores productivos en estas crisis de salud y económicas”, subrayó.
Reiteró que los sindicatos han cumplido con su papel: proteger los derechos de los agremiados, la salud de los trabajadores, vigilando que se cuiden a los de mayor edad, a los hipertensos, a los diabéticos, etcétera y que se les pague sus sueldos. También estamos de acuerdo en que se protejan a los enfermos con la atención médica y, sobre todo, el pago de salarios.
Qué riesgo implica esta situación que estamos viviendo, pues es más una política asistencialista la que se atiende. ¿Qué riesgos traería esto para el sector productivo? Se le preguntó.
Política económica del gobierno no existe con la iniciativa privada, lo que se tiene es una política fiscal, de terrorismo fiscal cobrando impuestos a diestra y siniestra, amenazando a medio mundo que pague sus impuestos, respondió.
Consideró que está bien la exigencia de pago de impuesto, pero, por otro lado, tampoco es la solución para el país cobrando impuesto, cuando no se produce la riqueza. “Valdría más que no se cobrara a nadie, porque no se produce el empleo; creo que, con una buena política fiscal, una buena política económica, pudiéramos generar riqueza y pudiéramos nosotros generar los ingresos al fisco”.
“Qué riesgo se incurre si no se llevan a cabo estas políticas, pues nuevamente lo mismo: falta de inversión, falta de empleo y no hay salarios para los trabajadores y entonces, todo este círculo económico que determine la venta de productos y servicios al público, y al consumo, se pierde ese círculo; y como consecuencia sale dañado el inversionista, el empleador, el trabajador, el ciudadano y México, nadie gana”, aseguró.
Sin embargo, insistió que a este gobierno eso no le interesa “y tenemos un riesgo alto de caer en una crisis profunda económica, que puede llevar a una crisis política y después a una crisis social, porque el desempleo lo que va a generar a corto plazo es el aumento de la delincuencia, por naturaleza y por necesidad, porque al no tener empleo ni ingreso, uno tiene que comer y la gente tiene que llevar satisfacciones económicas a su casa y de dónde: pues de la calle, y eso es lo que no se da cuenta, ha crecido la economía informal, en lugar de combatirla, parece que se fomenta; en fin, vemos a un gobierno federal no muy ad hoc a la cuestión económica, por su lucha contra el neoliberalismo y ese tipo de dogmas que pretenden imponer, sabemos que la economía es vital para el desarrollo de nuestra zona, de los gobierno y del estado mexicano, inclusive”.
“Entonces no hay interés en ello y por lo tanto estamos en una crisis que puede ser más grave, por ahí se dice que la recuperación puede durar entre tres y cuatro años más, para regresar a niveles del 2018, imagínate de lo que estamos hablando, si no se toman medidas ni correctivas, ni preventivas, ni estímulos fiscales, como le quieras llamar entonces tendremos una crisis de largo plazo”, concluyó.
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